Consiste en un objeto lejano en la nube de Kuiper, de órbita extrema y existencia fugaz, Es posible haber hallado el hipotético Planeta Nueve ¿O este hallazgo es algo aún más sorprendente?
En reciente estudio, pendiente de revisión revela el descubrimiento de 2017 OF201, un objeto transneptuniano de aproximadamente 700 kilómetros de diámetro, considerado un posible planeta enano. Este hallazgo, reconocido oficialmente por el Minor Planet Center de la Unión Astronómica Internacional, redefine nuestra comprensión de los límites exteriores de nuestro sistema solar. Las imágenes analizadas fueron captadas entre 2010 y 2017 por los telescopios Blanco (Chile) y Canadá-Francia-Hawái (EE.UU.).
Características orbitales y dinámica planetaria 🌌
La órbita de 2017 OF201 se distingue por su extrema excentricidad, con un afelio que lo lleva a una distancia hasta 1.600 veces mayor que la existente entre la Tierra y el Sol. Este recorrido elíptico se completa en aproximadamente 25.000 años, habiendo realizado su último perihelio en 1930, coincidiendo con el descubrimiento de Plutón. La trayectoria de este objeto desafía los modelos actuales de dinámica planetaria, lo que sugiere complejidades adicionales en las interacciones gravitacionales en los márgenes del sistema solar, donde incluso la influencia de la Vía Láctea podría desempeñar un papel.
El descubrimiento de 2017 OF201 ha revitalizado el debate en torno a la existencia del hipotético Planeta Nueve. A pesar de que su alineación orbital no se ajusta a los patrones que apoyan la hipótesis de dicho planeta, su mera presencia indica la vasta extensión de objetos aún no detectados. Los investigadores estiman que 2017 OF201 es visible solo durante el 1% de su periodo orbital, lo que implica la posible existencia de cientos de objetos similares que permanecen indetectables con la tecnología actual.
Sihao Cheng, astrofísico del Instituto de Estudios Avanzados en Princeton, enfatiza que este descubrimiento podría modificar nuestra percepción de un Cinturón de Kuiper relativamente vacío más allá de ciertas distancias. Esto podría, a su vez, requerir una reevaluación de las teorías sobre la evolución temprana de nuestro sistema solar. Se postula que 2017 OF201 pudo haber sido eyectado hacia la Nube de Oort y luego retornado por interacciones cósmicas aún no comprendidas.
“Podría haber decenas, quizá cientos de objetos similares, simplemente demasiado lejanos para ser vistos ahora”.
Cheng y su equipo utilizaron sofisticadas herramientas computacionales para rastrear la firma orbital de este objeto y desentrañar los pasos que lo llevaron a su posición actual: “Podría haber sido arrojado primero hacia la nube de Oort y luego retornado por alguna interacción cósmica aún desconocida.”
Con información de Arxiv

