La empresa Dyson, conocida por sus aspiradoras innovadoras, da un salto audaz a la agricultura con su “granja robótica” de fresas en una invernadero automatizado en Carrington.
Este sistema automatizado cultiva 1.225.000 plantas de fresa en 26 acres (10,5 hectáreas) al año, produciendo más de 1.250 toneladas de fruta británica fresca y sostenible, reduciendo las importaciones invernales que generan altas emisiones de carbono.
El corazón del proyecto es el Hybrid Vertical Growing System (HVGS): ruedas gigantes de 24 metros de largo y 5 de alto que rotan las plantas para maximizar la exposición al sol natural, complementada con luces artificiales. Esto ha aumentado los rendimientos en un 250% comparado con métodos tradicionales. Robots UV patrullan las filas eliminando moho con luz ultravioleta, mientras que otros liberan insectos benéficos para control natural de plagas, minimizando químicos. Brazos robóticos recolectan las fresas maduras con delicadeza, y el agua de lluvia recolectada del techo riega las plantas.
Alimentado por un digestor anaeróbico adyacente que genera electricidad renovable para 10.000 hogares y calor residual para el invernadero, el sistema cierra un ciclo sostenible. “Es nuestra visión para el futuro de la agricultura: máxima producción con mínimos insumos, manteniendo la calidad premium”, afirma Angel Angelov, gerente del invernadero. Dyson ya distribuye estas fresas en supermercados británicos, promoviendo la seguridad alimentaria local y cortando “millas de comida” de importaciones que viajan hasta 2.351 millas aéreas por lote.
Este avance no solo revoluciona la industria agrícola, sino que inspira una revolución tecnológica en la producción de alimentos, combinando ingeniería de precisión con prácticas ecológicas. ¿El próximo Dyson: tu huerto en casa?

