Monumento a Duke de Richelieu en Odessa. Foto: Ukraine GrosbyMonumento a Duke de Richelieu en Odessa. Foto: Ukraine Grosby

Un equipo de arqueólogos en Ucrania ha realizado un hallazgo sorprendente en el corazón de Odesa: restos de antiguas fortalezas y materiales que datan del siglo V a. C., justo debajo de la emblemática Escalera Potemkin.

Este descubrimiento sugiere que la ciudad portuaria ya era un asentamiento griego mucho antes de la llegada de los otomanos y los rusos. Las excavaciones fueron dirigidas por investigadores de la Universidad Pedagógica Nacional del Sur de Ucrania y el Instituto de Arqueología de la Academia de Ciencias. Según sus informes, los muros de una batería costera antigua contenían fragmentos incrustados de cerámica y otros materiales griegos, lo que indica una ocupación mucho más antigua de lo que se pensaba.

Los arqueólogos identificaron dos estructuras clave: el castillo de Ginestra, de origen genovés, y el Castillo de Hadzhibey, cuya ubicación había sido motivo de debate durante casi dos siglos. El primero revela la influencia de la República de Génova en el Mar Negro desde el siglo XI, mientras que el segundo fue reconstruido por los otomanos en el siglo XV y destruido por los rusos en 1789 durante una guerra entre ambos imperios.

“El hallazgo del castillo de Ginestra arroja luz sobre la red comercial genovesa en Crimea y su presencia estratégica en Odesa”, explicaron los investigadores. Los restos fueron encontrados en la plaza que corona la Escalera Potemkin, cerca de la estatua del duque de Richelieu, figura clave en la modernización de la ciudad en el siglo XIX.

Las excavaciones se realizaron junto a la estatua de bronce del duque de Richelieu, quien transformó Odesa a principios del siglo XIX. Foto: Universidad Pedagógica Nacional del Sur de Ucrania
Las excavaciones se realizaron junto a la estatua de bronce del duque de Richelieu, quien transformó Odesa a principios del siglo XIX. Foto: Universidad Pedagógica Nacional del Sur de Ucrania

Tecnología y paciencia: claves del descubrimiento

La búsqueda del Castillo de Hadzhibey se había reactivado en 2021 gracias al uso de georradares, pero fue interrumpida por la invasión rusa. Recién en junio de 2025 se retomaron los trabajos, que permitieron localizar los muros de la batería costera y confirmar su conexión con el antiguo acantilado. Esta posición ofrecía una ventaja estratégica sobre el puerto.

Los restos incluían carpintería desmontada, capiteles otomanos y escombros del siglo XVIII. Al analizar los materiales, los arqueólogos encontraron fragmentos del siglo V a. C., lo que sugiere que el muro fue construido antes de la presencia rusa y otomana. “Esto confirma que Odesa tiene raíces griegas profundas, y que su historia es mucho más cosmopolita de lo que se creía”, señalaron los expertos.

La superposición de capas históricas —griega, genovesa, otomana y rusa— convierte este sitio en un testimonio único de la evolución de Odesa como enclave estratégico en el Mar Negro. La plaza donde se hallaron los restos se confirma como un punto clave en la memoria urbana de la ciudad.

Este hallazgo no solo reescribe parte de la historia local, sino que también destaca el valor de la arqueología como herramienta para comprender el pasado y preservar el patrimonio cultural.

Con información de Instituto de Arqueología de la Academia de Ciencias de Ucrania

By Danny Ayala Hinojosa

Director de Ciencia1.com Apasionado por la ciencia y la tecnología, los viajes y la exploración de ideas en general. Profesional en IT: aplicaciones web y análisis de datos. Hoy emprendiendo en periodismo digital.