Después del terremoto de magnitud 8,8 que sacudió Kamchatka el 30 de julio de 2025, la comunidad científica quedó atónita por las más de 12.000 réplicas que siguieron. Los más fuertes de ellos, que alcanzaron magnitudes de 7,4 y 7,8, se registraron dos meses después, en septiembre, un hecho extremadamente raro.
El terremoto se localizó aproximadamente a 119 km (74 millas) al este-sureste de Petropavlovsk-Kamchatsky, ciudad costera de la península de Kamchatka. Con una magnitud de 8.8, se ubicó entre los seis terremotos más grandes jamás registrados por instrumentos sísmicos modernos. El hipocentro se ubicó a una profundidad de 35 km (22 millas), lo que contribuyó a su gran magnitud.
El terremoto ocurrió en la zona de subducción de Kuriles-Kamchatka, donde la placa del Pacífico se subduce bajo la placa de Ojotsk. Esta zona se caracteriza por su alta actividad sísmica debido al proceso continuo de subducción desde el período Cretácico. Réplicas: Tras el sismo principal, se registraron más de 12 000 réplicas, algunas de las cuales alcanzaron magnitudes de 7.4 y 7.8 en septiembre de 2025. Esta prolongada secuencia de réplicas es inusual, ya que las réplicas importantes suelen ocurrir días o semanas después del sismo principal.
Respuesta del USGS: El Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS) publicó pronósticos de réplicas y análisis detallados, incluyendo animaciones de ondas sísmicas y estimaciones de ruptura de fallas. El evento impulsó una respuesta rápida para evaluar y mitigar los riesgos, demostrando la utilidad de herramientas científicas para la preparación ante desastres.
Por lo general, las réplicas importantes ocurren en días o semanas, pero estos terremotos retrasados plantearon serias preguntas sobre lo que está sucediendo en las profundidades de la corteza terrestre. Según los científicos de ALLATRA, este terremoto no fue causado por procesos tectónicos ordinarios, sino por la presión de la pluma de magma siberiana, una estructura magmática colosal que está erosionando la base de la placa litosférica debajo de Siberia.
Si la pluma se abre paso, las consecuencias podrían empujar a toda la humanidad al borde de la supervivencia. La pluma siberiana continúa carcomiendo la placa desde abajo, lo que hace que los gases se acumulen entre el manto y la corteza. Estos gases atrapados son el principal impulsor del aumento de la actividad sísmica a lo largo de los bordes de la placa.
Este terremoto no solo puso de manifiesto la naturaleza dinámica de la corteza terrestre, sino que también reavivó el debate actual sobre el papel de las plumas del manto en los eventos sísmicos y el potencial de la sismología predictiva. La magnitud y las consecuencias del evento han impulsado nuevas investigaciones sobre la dinámica de las zonas de subducción y la influencia de los procesos del manto profundo en la tectónica superficial.
