Un hallazgo científico ha devuelto la esperanza a la conservación de la biodiversidad en Bolivia. Se trata del redescubrimiento del pez Moema claudiae, una especie que había sido catalogada como “En Peligro Crítico” y posiblemente extinta por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
El descubrimiento fue realizado por los investigadores Heinz Arno Drawert y Thomas Otto Litz, quienes publicaron sus resultados en la revista Nature Conservation. La nueva población fue encontrada en un pequeño estanque temporal dentro de un remanente de bosque en el departamento del Beni, unos 100 kilómetros al noroeste de la localidad tipo donde originalmente se había registrado la especie. Ese sitio había sido destruido por la expansión agroindustrial y la modificación de los sistemas hidrológicos, lo que hacía pensar que el pez había desaparecido para siempre.
Los científicos identificaron a los ejemplares gracias a rasgos diagnósticos descritos en la literatura, como la característica mancha negra vertical que presentan los machos. Además, lograron obtener las primeras fotografías en vida de esta especie, que ahora forman parte de la Colección Ictiológica del Museo de Historia Natural Noel Kempff Mercado.
Vulnerabilidad y amenazas
Los rivúlidos, grupo al que pertenece Moema claudiae, son peces especialmente vulnerables. Su distribución geográfica es muy restringida, dependen de hábitats temporales como charcas estacionales y tienen una baja capacidad de recolonización. Esto significa que cualquier alteración en su entorno puede ponerlos al borde de la desaparición.
La deforestación y el avance de la agroindustria han reducido drásticamente los humedales estacionales que estos peces necesitan para sobrevivir. El área donde se encontró la nueva población está rodeada de cultivos extensivos, lo que aumenta el riesgo de pérdida de hábitat y amenaza la diversidad de killis estacionales que coexisten en la región.
Los autores del estudio subrayan que este hallazgo podría cambiar el destino de la especie. “El redescubrimiento demuestra que Moema claudiae aún persiste en la naturaleza pese a las amenazas que enfrenta”, señalaron Drawert y Litz. Ambos exhortan a que la zona sea protegida con urgencia, ya que constituye la única localidad conocida con presencia confirmada de la especie y uno de los sitios con mayor diversidad de rivúlidos en Sudamérica.
Para los investigadores, la protección de este hábitat no solo es vital para Moema claudiae, sino también para garantizar la supervivencia de otras especies que dependen de los mismos ecosistemas temporales.
El redescubrimiento de Moema claudiae abre una ventana de esperanza, pero también plantea un desafío inmediato: asegurar que esta población no vuelva a desaparecer. La conservación de los humedales estacionales y la regulación de la expansión agroindustrial son medidas urgentes para evitar que este pez regrese al umbral de la extinción.
Con información de International Union for Conservation of Nature
