
Los principales riesgos volcánicos del Chachimbiro, un volcán de lavas viscosas, incluyen la formación y caída de domos de lava, flujos piroclásticos y caídas de ceniza derivadas del colapso de domos y emisiones de gases. Estos peligros pueden afectar a poblaciones y balnearios cercanos, por lo que es crucial que las comunidades se mantengan informadas a través de canales institucionales y oficiales para estar preparadas en caso de una eventual actividad eruptiva.
Flujos y Domos de Lava. Las lavas del Chachimbiro son muy viscosas con una temperatura de 850-950°C. Estas lavas se mueven lentamente y forman coladas muy espesas o domos con pendientes altas. Estos flujos o domos de lava pueden causar incendios y los colapsos podrían producir flujos piroclásticos.
Flujos Piroclásticos. Son mezclas muy calientes de gases, ceniza y fragmentos de lava que descienden por los flancos del volcán a grandes velocidades arrasando todo a su paso. Debido a las características de las lavas del Chachimbiro, es muy probable que se produzca este tipo de fenómeno. Las poblaciones de Pitzanza y Chachimbiro son las más vulnerables a este peligro, pero en caso de erupciones grandes, las poblaciones como Urcuqui, San Blas y Tumbabiro podrían también ser afectadas.
Caídas de piedra pómez y Ceniza. Las explosiones volcánicas producen fragmentos de lava de todo tamaño. Los fragmentos más grandes caen cerca del volcán y pueden representar un gran peligro inmediato a personas e infraestructura cercanas. Las partículas de ceniza son acarreadas por el viento y pueden dañar cosechas e infraestructuras, contaminar los pozos de agua y afectar la salud de las personas y de los animales. Las caídas asociadas a grandes erupciones pasadas del Chachimbiro afectaron a todo el cantón de Urcuquí y una gran parte de la provincia de Imbabura en tiempos prehistóricos.
Gases Volcánicos. Antes, durante y después de una erupción, el volcán puede emitir una gran cantidad de gases, siendo el principal vapor de agua. Otros gases frecuentes como el dióxido de carbono (CO2), el dióxido de azufre (SO2) y el hidróxido de azufre que pueden reaccionar con el vapor de agua y producir lluvias ácidas altamente corrosivas. Algunos gases son muy tóxicos y pueden afectar a los ojos y al sistema respiratorio. Es importante tener cuidado al acercarse a las fuentes termales como Timbuyacu, ya que una gran cantidad de CO2 se libera al mismo tiempo que el agua. Este gas es incoloro, inodoro y más pesado que el aire, y se puede acumular en depresiones topográficas produciendo asfixia de los seres vivos.
Flujos de Lodo Volcánico (Lahares). Los lahares son mezclas de material volcánico con agua proveniente de ríos, lagunas o de fuertes lluvias que pueden ocurrir durante o después de una erupción. Estos flujos descienden por los drenajes naturales a grandes velocidades destruyendo todo a su paso. Los ríos más susceptibles de ser afectados son el Cariyacu, el Huarmiyacu, el Pigunchuela, el Pablo Arenas y la quebrada Cachiyacu. Estos eventos han sido comunes en la historia del Chachimbiro.
Deslizamientos y Avalanchas de Escombros. Las avalanchas de escombros son el resultado de grandes deslizamientos del volcán. Estos flujos muy rápidos pueden cubrir una gran área y sobrepasar barreras topográficas arrasando todo a su paso. Son poco frecuentes, pero han ocurrido dos veces en la historia del volcán Chachimbiro. Sin embargo, deslizamientos más pequeños como los del Cerro la Viuda o del Churoloma pueden ocurrir más a menudo debido a terremotos o lluvias excepcionales.
Tríptico Volcán Chachimbiro Bernard and Robin 2012, Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional del Ecuador.
